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historias-troyanas

Vivir

Ya que estamos en período vacacional y todo se paraliza,no quiero dejar de ser altavoz de algunas voces cuyas reflexiones no suelen dejarnos indiferentes.

5 comentarios

troyana -

Sí,hay que vivir,Cosaco,parece incuestionable,aunque a veces conlleve un gran esfuerzo seguir tirando del carro...pero la cuestión es si nos mojamos con la vida,como dice Sabina "si la vida se deja,yo le meto mano..."¿lo hacemos siempre?
un abrazo

Juan Cosaco -

por fin he podido ver el video de quintero,chica!
menos mal, porque andaba un poco zombie, jaja.
hay que vivir, si, es evidente. o mejor dicho, no, no está tan claro; pero es incuestionable. las cosas incuestionables son las más difíciles de demostrar.
Punset vive, pero a cámara lenta, jajajaja
bsos!

troyana -

Antígona, precisamente porque no siempre es así,ni seguimos a pies puntillas esta máxima, es por eso,que de cuando en cuando conviene recordarla.Yo al menos no siempre me subo a todos los trenes, a veces,vivo y a veces estoy en la vida.Tal vez,pienso que siempre habrá más momentos,más oportunidades, es un optimismo quizá algo ingenúo el mío.
En cuanto al amaneramiento de Quintero,no sé muy bien si termino de entenderte:resabiado?
en cualquier caso, a mí me gusta porque se mueve siempre en "territorio comanche" y le gusta explorar la condición humana,no hay muchas voces y menos por la tele que se entretengan en estos menesteres(¿Punset?)
Un abrazo

Antígona -

A ver si ahora por fin consigo dejarte un comentario en el sitio que toca, que, al menos desde mi ordenador, hay un despelote para dejártelos...

Reconozco que a veces me molesta un poco el tono amanerado de Jesús Quintero. Pero no se puede negar que sus palabras son sabias, y sus reflexiones, como dices, válidas para todos.

Me gustaría que fuera posible mantener día a día esa actitud de vivir y no meramente de estar en la vida que Quintero describe. Que, como dice, cada día pudiéramos despertar como si fuera el primero, tratando de vivir intensamente cada instante como si fuera el último.

Porque la experiencia siempre nos demuestra que no lo es. La cotidianidad nos apaga y nos hace rodar por el mundo con una cierta inconsciencia con respecto al hecho de que cada minuto que pasa es un minuto perdido. Nos sitúa en ese estar en la vida que no es realmente vivir.

Pero supongo que nunca hay que dejar de tener presente esta máxima y tratar de vivir conforme a ella. Si al menos lo intentamos, es posible que logremos arrancar a la cotidianidad más momentos de vivir que de estar en la vida.

¡Un beso!

Bichicome -

El cartero no viene 2 veces???